viernes, 25 de junio de 2010

Prólogo.




Para ti y todos los que en esta palabra quepan.




“La comedia que van a escuchar es la humilde e inquietante comedia

rota del que quiere arañar la luna y se araña su corazón.”


Federico García Lorca.



“Loco no es el que ha perdido la razón, sino el que lo ha perdido todo,


todo, menos la razón. "

Gilbert Keith Chesterton.





Prólogo.


Queridos personajes (sean quienes sean y lo que sean) de esta nuestra vida, en la que se intercalan pequeñas maldades tales para que podamos soportarlas, es posible que no escriba para nadie y ustedes no existan más que en mi imaginación o quizás en un reducto de mi memoria, de cualquier modo me siento más cómoda dirigiéndome a alguien.


Desconozco su naturaleza e incluso la mía si me apuran, y es posible que esto carezca de toda importancia, pero quizás ahí resida todo su interés. No pretendo enjuiciar a nadie con este escrito más allá de a la humanidad entera, a esa antigua desaparecida, de la que solo quedan hombres que desconocen el sentido de esta palabra. Son sus predecesores, hijos del avance, de la sucesión continua de hechos, esa que algunos erraron en llamar progreso y así ellos mismo en él confiados asistieron como pasivos espectadores a su propio suicidio silencioso e indoloro, y por encima de ello asistieron a él como sus inocentes instigadores.


Me despido de ustedes por último y sean quienes sean para dar paso a la historia y juzguen por ustedes mismos, si no actúan los hombres en beneficio de un recuerdo borroso al que intentar ser rigurosos, a ese recuerdo de la humanidad o si realmente siguen siéndolo, si en algún recóndito lugar de su alma queda un rescoldo de ella, o tan solo su recuerdo.



De los motivos de la escritura.



Sentada frente a ti, tú ávido y yo desbordante, tú eternamente blanco, yo eternamente gris. Tu blancura me daña y me ofende, ¿por qué tú y no yo tienes ese privilegio? Yo no hice nada peor de lo que pude, ni lo suficientemente bien para que resultase aceptable. Tú simplemente no hiciste nada.


Tu blancura me quema la retina, como si luminosa en ella se incrustara, tú cada vez más negro, yo cada vez más fría.


Chupas de mí sin miedo de lo que puedas encontrar, chupas de mí sin miedo de lo que quede dentro. Tú cada vez más lleno, yo cada vez más sola.


Te apoderas de mis pensamientos sin permiso y es que no puedo hacer nada contra esa blancura tuya que me enloquece y llama, quedan en ti las palabras, huye de mi el recuerdo. ¿Por qué no puedo recordar más de lo que sé ni menos de lo que quiero? Ni lo sé, ni me importa, sólo te pido que no me obligues a seguir haciéndolo.


Tu blancura sigue imperturbable y yo impávida y abúlica no puedo seguir dando, mientras tu inconmovible no puedes sino seguir hiriendo, no sé aún si eres tú el valiente por seguir aquí tirando sin miedo a acabar mojado, o quizá sea yo la cobarde por querer culparte, tú cada vez más duro, yo cada vez más débil.


Porque eres perfecto y por mucho que yo intente rallarte, porque no me atrevería a romperte en pedazos tras todo lo que de mí sabes tú que solo recogiste no sufres ni cambias tras mi paso, porque de lo que te di, era todo mío, y lo que tú me diste siempre será tuyo.


Mientras yo aquí me quedo sentada frente a ti, tú ávido y yo desbordante aunque no quiero decirte lo que callo ni contarte lo que siento tu blancura infinita me quema las retinas y por más que escribo y escribo tú impasible, igual de blanco sigues. Quizás llegue pronto el ocaso y te tiña de tonos rojos ¿qué importa ya? no tengo miedo al paso del tiempo ¿por qué habría de temer que esto acabe? Si tú sigues igual de ávido, yo igual de sola, igual de vacía, tú eternamente blanco y yo internamente gris.



Oph**



(Cada 3 ó 4 días intentaré publicar un nuevo capítulo de la historia, que empieza aquí, repetiré esta información al final de cada capítulo, que os remitirá aquí, para que leáis desde el principio y no fragmentos inconexos, de cualquier modo, leer un solo capítulo resulta en la mayor parte de los casos bastante sencillo y no suele imposibilitar la comprensión del fragmento, espero que os guste.)

2 comentarios:

  1. Desde mi punto de vista de genio de la literatura universal, veo que usted es una joven promesa que tiene un futuro muy prometedor si sigue por ese camino de esfuerzo. No he visto a nadie que escriba mejor desde hace años espero que siga escribiendo así y me siga deleitando con sus sublimes ensayo y narraciones.

    ResponderEliminar