viernes, 24 de junio de 2016

Espacio.

De-í-dad/o/s.

12.45

“La lluvia persistente nocturna disolvía la línea de separación entre los seres y las cosas, aproximándolos, a ellos, a las cosas en que más tarde o más pronto, se han de transformar.” J.S

01.30

De un sueño que es más real que tu otredad, Decisiones más plásticas que esta ciudad, tan absurdas, Lenguajes de un sopor que excede fisicidades, Sentir la fuerza de la tierra que sostiene a cada átomo

10.30

– disfrutar a un tiempo el calor del invierno y el frío del verano, 
Rodar en la grieta que entre ambos se abre, No temer caer, Desear –
01.45

No creer en ninguna verdad más que la tierra, Desear la lluvia que parta el cielo en dos, que me arañe la piel y me despierte, que disipe a las nubes a base de trueno, Liberar un latido que en tres abra el pecho y libere mariposas, recoger gusanos y asumir que no hay más que barro, que costillas, Que incluso aquello era mentira, Regresar al país sin sol ni nubes y que de allá fueran las mismas, que solo se han girado, que se comparte la misma tierra, que se sostiene a cada átomo, que aplasta cada vértebra y constriñendo el crecimiento nos deja vivir.





Somnias

2.50

Miedo.
Cerrar los ojos de barcas llenos de remeros,
de bocas,
Hija,
Hablarse para hacerlo callar,
Sin duda temer
Casi siempre ahogar.

Gritos que de impaciencia se escapan en la doble distracción
¡¡Pero ¿a dónde/adónde/dónde?!!

3.15

Caerse en el ruido,
Abren los gritos a la herida,
La herida no se calla,

No es posible estar despierta. 

jueves, 23 de junio de 2016

Forever I wake up

A Tin.


cada día
    en cada tic,
    en cualquier tac,
    cada riesgo de muerte,
                          ...ca/ll/a
    cada atisbo de vida:
dudar.

siempre
    y al rato,
    tal vez luego
    ahorita,
    ya en seguida
    en cada segundo,
    a todas horas
    en cualquier esquina:
despertar

para cualquier eternidad conocida
    en cualquier instante que venzamos a la muerte
    despegar el párpado:
    dejar entrar los prados,
    dejar romper las olas,
    agarrarse a los muros,
    ahogarse y disipar el sueño,
    desafiar los cansancios,
    enterrar la pesadilla,
    el sudor,
    los fríos
    y las sábanas vacías:
levantarse

a la vera,
    dilatar la pupila,
    desplegar la Víscera,
    absorber del poro,
    aspirar la vida:

        hasta llenarnos del calor de todos los soles,
        de todas las luces,
        y así hinchados
        de humores y de vientos calientes

volar,
despiertos.

No, ellos no son más felices, sólo están más muertos.