domingo, 30 de noviembre de 2014

With.

"It can't be poeple that don't want to be friends with the girl that starts screaming"

Sin embargo puede que esta sea la única forma de ser coherente y sobrevivir a este mundo "bicéfalo y misceláneo".

En el dislate entre el querer y el saber querer (lo) a veces se nos cuela un beso de paz, que ahoga el grito, que acalla el llanto como lo haría mano sobre boca, labio sobre labio.
- Escucha, aun te late el corazón, aun está vivo, pero hay que dejar de gritar, que así no me oyes las caricias.

A veces entre el beso y el grito se cuela un silencio, frío como una bofetada, y entonces, claro, no se escuchan corazones y no se sabe si mueren o respiran.
A veces entre el delirio de un silencio ensordecedor y una bofetada callada se nos cuela una incomprensión ya hecha cenizas.

A veces, entre las cenizas y el silencio se acaba el beso. A veces entonces respiramos.

Oph.




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