lunes, 30 de abril de 2012

Me gustas cuando llueve.


No podrá parecerte que llueve si el corazón ríe, no es más que el cielo, que se cae, y desvanece con cada suspiro de todo aquel que le ve llorar, mientras que no hace sino esforzarse porque el sol vuelva a erigirse.

Y mientras tanto en suplica perdón o remienda de súbita recompensa no puede sino acercarte a aquel cielo anhelado, aunque solo sea por unos instantes.

Por eso me gustas cuando llueve,

Será porque me gusto cuando ríes. 

Oph**

1 comentario: